14ª y fin de etapa: Ribadiso da Baixo - Santiago de Compostela

Sábado, 28 de octubre de 2006

Amaneció con niebla, el albergue está en un pequeño valle con el río Iso. Vemos el mojón de 39,5 Km. que es lo que nos falta para finalizar el camino. Llegamos a Arzúa para desayunar e inflar la rueda trasera de la bicicleta de Expresoo que perdió aire por la noche en el albergue. Dejamos el casco urbano de Arzúa, subimos un repecho con buen firme de tierra. Se suceden subidas y bajadas como en la etapa anterior. Cruzamos aldeas por tramos asfaltados, unos y de tierra otros.De vez en cuando vemos los mojones cada medio kilómetro para saber lo que nos falta. En varios sitios tenemos que cruzar la N-547 y en otras ocasiones por debajo, otras se aleja de la nacional y la vuelve a encontrar. El firme es de tierra con piedras y con charcos. Tomamos un respiro y paramos en un bar en Santa Irene. A partir de aquí, pasando por Arca do Pino, el camino es de bajada hasta Brea, vertiginosa, sería la denominación. Iniciamos la subida a Labacolla por el monte, durante unos kilómetros. Cada uno sigue el ritmo que puede y nos encontramos en la cima, con el ruido de los motores de los aviones a nuestro lado. Seguimos hacia San Marcos, sobre el firme de asfalto hasta el final de etapa. Entramos por la puerta del camino, seguimos por la Plaza de Cervantes y llegamos a la Plaza del Obradoiro a las 14 y 20. Sellamos nuestras credenciales y nos otorgan la Compostela.Después de llenar los estomágos, acompañados en la comida de Marco y Feli, oimos misa en el Catedral de Santiago de Compostela a las seis de la tarde. Cogimos el tren devuelta a nuestro punto de retorno.

FIN DEL CAMINO DE SANTIAGO DE COMPOSTELA.

13ª Etapa: Sarría - Ribadiso da Baixo

Viernes, 27 de octubre de 2006

Ya al salir de Sarría, nos encontramos con el primer repecho ya de mañana para calentar el cuerpecillo. Resulto a esas horas un poco duro. Pasamos posteriormente por corredoiras que unen los pueblos y que son utilizados por el ganado. A veces era necesario echar pie al suelo para seguir el camino debido a grandes piedras que no estaban niveladas y que dificultaban el camino a las bicicletas. La subida aunque no fuera percibida desde Sarría, por cada pueblo que pasabamos, era palpable, debido a que aparecían algunos cortos repechos. Así pasamos por las aldeas de Barbadelo, Morgade y el último fue el de Ferreiros que resulto el de más altitud (663 m). Ahora lo que faltaba era la bajada pronunciada hasta Portomarín que está a 325 m. de altitud. Esta bajada se hace rápidamente, con cuidado y cuatro ojos ya que se encuentran llenas de piedras, descubiertas por la corriente fuerte de los regatos de la lluvía, que cayó en días precedentes. Antes de llegar a Portomarín se cruza el puente, donde vemos el embalse de Belesar, así como las escaleras que llevan a la Iglesia. Cuando el nivel de las aguas es más bajo, se puede ver los restos de las casas de la antigua ciudad que ahora están cubiertas. Compramos comida en el pueblo. Después de sellar la credencial dejamos Portomarín, e iniciamos un repecho largo sobre tierra. Posteriormente el recorrido se torna subes y bajas -el llamado rompepiernas-. Cruzamos las aldeas de Gonzar, Ventas de Narón y Ligonde con el Alto que da a su nombre, El trayecto se realiza por caminos de tierra, pero tiene el inconveniente que con frecuencia se cruza la carretera. Se cruzan aldeas por correidoras -y eso sí, Elñicao interesado por los nombres de los lugares- con el firme de tierra y jalonados a ambos lados del camino por castaños. Llegamos a Melide -después de cruzar el puente de Furelos- a las 19 y 20. Rápidamente nos dirigimos a el albergue de Ribadiso da Baixo -por recomendación de Expresso- ya que la noche se nos echaba encima. En un paso de piedras sobre el río Iso, el Expresso pierde el equilibrio y cae al río, empapándose los dos pies. Una vez secado los pies, reanudamos el camino, pero poco a poco se ve menos. Sacamos las linternas para alumbrar el camino. LLegamos a las nueve de la noche al albergue de Ribadiso da Baixo. Las intalaciones son excelentes.

Quedan 42 Km. para llegar a Santiago de Compostela.

12ª Etapa: O Cebreiro - Sarría

Jueves, 26 de octubre de 2006

Partimos de Piedrafita do Cebreiro a las 9 y 30 hasta O Cebreiro -1330 m. de altitud-, que está a cuatro kilómetros, se hizó por la carretera asfaltada. Era de subida hasta la cima. Allí sellamos la credencial en la Capilla de Santa María de la Real. Había niebla que se iría disipando durante la mañana. Dejamos la carretera anterior para desviarnos por caminos de tierra hasta llegar a el Alto de San Roque -1270 m de altitud-, que está en la carretera. Volvimos otra vez a caminos de tierra, hasta llegar a el Alto de Poio -1335 m de altitud. Se hubo de tener cuidado, porque había tramos que eran estrechos y muy cercanos al abismo. El paraje por el que transcurría el camino era por arbolado de diferentes clases. Por último nos quedaba el Alto de Poio, dónde el último tramo para llegar lo hicimos saltando de la bici, debido al gran desnivel que había. LLegados a el alto, descansamos un poco. Reanudamos el camino, que sería hasta el final de bajada continuada. Parada para comer filloas, según el Expresso, ya que con anterioridad había realizado el camino. La bajada fue vertiginosa, no sin cautela debido a la gran cantidad de lascas de pizarra por todo el camino. Las vistas del valle eran espectaculares y agrabables. En la aldea de Ramil paramos a ver el castaño que tenía el diámetro del tronco bastante considerable. Al final llegamos a Triacastela, donde se bifurca el camino hasta Sarría. Uno va por Samos y otro por San Xil. Optamos por el de San Xil .El mismo disponía de repechos y bajadas sobre corredoiras de tierra alfombrado por las hojas de los castaños caídas, así también de las castañas, todo el trayecto resultó muy agradable. LLegados a la carretera y a falta de 8 km. para llegar a Sarría, el camino se vuelva a desviar por un sendero de tierra utilizado por los lugareños para llevar a pastar las vacas a las fincas y llevarlas después a las cortes. A cuatro km de Sarría, el Expresso de medianoche pincho la rueda. Aprovechamos entonces, para comer -que era lo que nos faltaba- una comida campestre en el prado. Arreglado el pinchazo y comidos y bebidos retornamos a las bicicletas camino de Sarría, que sería final de la etapa de hoy. Compramos unas cámaras para bicis, zapatas y cables de frenos, Llegamos a las 7 y 20.Nos alojamos en el albergue de Don Alvaro. Instalaciones muy buenas. Nos hicimos la cena y nos deleitamos con el calor al lado de una chimenea, con tres extranjeros que eran los que había en el albergue.

Quedan 112 Km. para llegar a Santiago de Compostela.

11ª Etapa: Ponferrada - O Cebreiro

Miércoles, 25 de octubre de 2006

Salímos de Ponferrada a las 10 más o menos, ya que se tuvo que cambiar, otra vez, la llanta de Josiño. A primera hora la mañana presagiaba un día nuboso, amenazando lluvía, pero a medida que pasaba, se fue abriendo hasta la final de etapa. El primer tramo de camino se realizó por asfalto hasta Cacabelos. A partir de hay cruzamos por los viñedos del Bierzo, por caminos de tierra y encharcados de agua. Volvimos al asfalto y no lo dejaríamos hasta la llegada al Cebreiro. La subida por la Faba era impracticable, así que lo hicimos por la carretera nacional VI. Tanto la autovía, el río Várcacel y la carretera nacional VI iban discurriendo a través del fondo de los montes de León. Dejamos atrás Villafranca del Bierzo y llegamos al albergue de Pereje para comer, antes de inciar la subida. Las instalaciones eran privadas, pero como no había nadie, procedimos a sellar la credencial y comer. El albergue disponía de un bajo -para los baños y duchas-, entresuelo -los dormitorios- y el ático -cocina y salón. La calidad del mismo era superior y por eso lo resaltamos. Al finalizar de comer, volvimos a la bicicleta pasando por las aldeas de, Trabadelo, Ambasmestas y por último lugar Vega de Valcarce, que es dónde empezaba la subida. Ésta era progresiva y había tramos con más pendiente que otros. El Experesso siguió su ritmo, quedándose atrás, tanto Josiño como Elñicaco siguieron a buen ritmo llegando a Piedrafita do Cebreiro en primer lugar a las 19 horas. Estuvimos esperando al Expresso de medianoche, para realizar el último tramo hasta O Cebreiro juntos , pero para nuestra sorpresa el Expresso ya había realizado la subida solo. Ni él nos vió y nosotros a él tampoco en Piedrafita. Así él firmó la credencial con fecha de hoy y nosotros tendríamos que realizarlo mañana. El albergue que está en O Cebreiro estaba cerrado por reformas, así que no nos quedó más remedio que preguntar por el precio de los hostales, tanto en O Cebreiro -preguntó el Expresso- y en Piedrafita -Josiño y Elñicaco-, optanto por el Hostal O Peregrino, en Piedrafita por ser el más barato. El matrimonio que regenta el Hostal fue de lo más atento con nosotros, durante el tiempo que permanecimos en el Hostal.

Quedan 162 Km. para llegar a Santiago de Compostela.

10ª Etapa: Astorga-Ponferrada

Martes, 24 de octubre de 2006

Fuimos a recoger las bicicletas y la de Josiño estaba desinchada, aprovechamos en el desayuno en el Bar Minero para cambiar la llanta. Salimos de Astorga a las 10:00 por dicho motivo. Amaneció con niebla y a medida que vamos subiendo cae llovizna. El primer tramo para salir de la ciudad es urbano, pero pronto se encuentra sendero de tierra que va paralelo a la carretera. La subida se va realizando mientras se va peladeando desde Astorga que está a una altitud de 869 m. hasta Rabanal del Camino ,que está a 1149 m. Pasamos por las localidades de Murias de Rechivaldo, Santa Catalina de Somoza y el El Ganso. Al llegar a Rabanal del Camino se puede optar ir por la carretera o ir por camino de los peregrinos. Optamos por el camino de los peregrinos. Nos encontramos con lascas de pizarra, las subidas ya son más pronuniadas y descansillos, y así hasta llegar al alto de la Cruz de Ferro -1500 m aproximadamente- a las 13 y 40. El Expresso de medianoche llegó en primer lugar, posteriormente Elñicaco y Josiño. En la bajada hacia Ponferrada desde el Alto de la Cruz de Ferro nos recomiendan hacerla por la carretera, no así por el camino de peregrinos. Además no habría otra opción debido al estado en el que estaban los frenos. Josiño le prestó una zapata trasera al Expresso y ajusto los frenos delanteros y Elñicaco arreglo las suyas. Nos paramos a comer en el Acebo. Nos vinó muy bien el descanso para coger un poco de calor. El tiempo iba clareando y había dejado de lloviznar. La bajada se hizó con precaución por la carretera que zigzagueaba continuamente. El paisaje es realmente alucinante, los montes en está época de otoño, los desfiladeros, etc. Llegamos a Molinaseca y a pocos kilómetros a Ponferrada a las 18 y 30. Nos alojamos en el Albergue de San Nicolás de Flue, buenas instalaciones, así que está recomendado.

Quedan 208 km. para llegar a Santiago de Compostela.